El chico sobre la mesa… ¿Os recuerda a alguien?
Se trata de una imagen perteneciente al cuadro “The Calling of St Matthew”, de Caravaggio
Esta obra de Caravaggio es un gran manifiesto del tenebrismo en el panorama pictórico universal. La luz aporta potencia dramática y simbólica. Podemos hablar de una luz dual. Por un lado, es una luz apta para representar la realidad física y, por otro, para representar el rayo divino. La luz parece entrar con Cristo, la diagonal de su mano se corresponde con la del haz de luz que proviene del ángulo superior derecho. El espacio responde al interior de una taberna, lo que contribuye a potenciar el claroscuro.
Se ha captado el momento más dramático de la acción. Cristo extiende su mano para señalar a Mateo, quien a su vez se señala como sorprendido. Así, se establece una continuidad y comunicación entre gestos, recurso netamente barroco. Se trata de reflejar la duda de Mateo. Él tiene que decidir entre seguir su vida anterior como cobrador de tributos o su vida futura como seguidor de Jesús.
A nuestra izquierda, aparecen los personajes vestidos a la moda del siglo XVI. Esto contribuye a hacer más creíble el hecho del milagro. Cualquier momento es válido para que acontezca el milagro. A Caravaggio siempre le gustó humanizar los contenidos religiosos.
Se ha hablado de composición de lugar, en ella los personajes divergen en reacciones: los personajes más cercanos a Jesús y Pedro son conscientes del milagro, mientras, los demás permanecen absortos en su tarea de contar las monedas.
Aquí la imagen del cuadro completa:
¿parecido, no creen?
Gracias a Todo Twilight Saga
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