Diferentes publicaciones destacan el lado más sexual del actor. Pero quizá Robert esté enfocando demasiado su carrera en el romance y el sexo en pantalla.
Robert Pattinson bien sabe que ser actor no es fácil. Menos aún cuando te conviertes en un fenómeno mundial de la noche a la mañana. Ante esta encrucijada, actores como Rob o su compañero Taylor Lautner se ven en la tesitura de elegir qué papeles marcarán el sendero de su carrera.
Y entre uno de los más comentados para R-Patz está el papel de protagonista en Bel Ami. Las fotos de sus encuentros sexuales con Uma Thurman y Christina Ricci han caldeado los foros y tertulias de Internet para deleite de sus fans femeninas. A ello hay que añadir el esperado estreno de Breaking Dawn, donde por fin "consuma" su relación con Kristen Stewart y donde los twi-hards esperan con ansia las escenas sexuales de la boda y la luna de miel.
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Sin embargo, tengo por seguro que Robert Pattinson no desea pasar a la historia como galán del cine. Por el contrario, el novio de Kristen Stewart parece más un chico talentoso con un físico peculiar que sólo por azares del destino (si acaso hartazgo con los cánones de belleza imperantes) ha resultado un sex symbol para las nuevas generaciones.
Pues bien, Robert Pattinson debe andarse con cuidado si no quiere encasillarse como el chico guapo de la película. Él puede dar mucho más que eso, y esperemos que los productores de Hollywood así lo entiendan.
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